Por tercer año seguido, el pasado
14 de diciembre, celebramos la fiesta de la Virgen de Guadalupe en Sucumbíos,
recordando que es nuestra patrona. Este año hemos celebrado en la comunidad shuar
de Taruka, en el cantón Cascales, provincia de Sucumbíos – Ecuador.
Contamos con la participación
centenas de devotos indígenas y colonos que se pusieron en procesión desde
Cascales hasta Taruka, donde celebramos la Eucaristía presidida por Mons. Celmo
Lazzari, vicario apostólico de Sucumbíos. Antes de finalizar la celebración,
Mons. Celmo hizo la bendición de los servidores (catequistas y animadores) y de
la nueva directiva del SICNIE-Sucumbíos para la labor misionera que realizan en
sus comunidades y sectores.
Después de la celebración, se compartió
el almuerzo comunitario y se realizaron presentaciones culturales de diversas
comunidades kichwas y shuar de nuestra parroquia personal indígena Ntra. Sra.
de Guadalupe.
Recordamos que delante la dificultad que pasaba Juan Diego y el pueblo
indígena, la Virgen María se le aparece en el cerro de Tepeyac, como Madre y
Consuelo de los pueblos indígenas: “¿Acaso no estoy aquí yo, que soy tu Madre?”.
Nosotros
hoy, como hace 483 años pasó con Juan
Diego, seguimos experimentamos el amor y el cariño materno de nuestra Mamita
la Virgen de Guadalupe y su predilección por los sencillos de corazón. Ella nos
invita a poner todo nuestro corazón, nuestra mente, nuestras comunidades,
nuestra Madre Tierra en sintonía con el Espíritu de su Amado Hijo, Jesús para que la Nueva Tierra se vaya haciendo más visible.
P. Julio Caldeira, imc
