martes, 12 de marzo de 2013

UNIDAD DE PASTORAL INDÍGENA


 
La Pastoral Indígena específica viene funcionando en ISAMIS (Iglesia de San Miguel de Sucumbíos) desde finales de la década de los 70. En la primera etapa no se distinguía una pastoral específica para los pueblos indígenas. El primer equipo de pastoral exclusivamente dedicado a la pastoral indígena nace en 1978, iniciando así la pastoral específica.

En 1983 cuando la pastoral general de ISAMIS se organiza desde una estructura de Departamentos nace también el de Pastoral Indígena.

En 1986, durante el primer Plan de Pastoral se le concede a la Pastoral Indígena un grado mayor de autonomía que apunta hacía el nacimiento de una Iglesia Indígena en Sucumbíos. Este camino se completa en el actual Plan de Pastoral en el que se organiza la Unidad de Pastoral Indígena.

La pastoral Indígena de ISAMIS quiere impulsar una pastoral que responda a los llamados de S. S. Juan Pablo II: “Qué feliz día aquel en el que sus comunidades puedan ser servidas por catequistas, sacerdotes, religiosas, incluso algún obispo de sus mismas etnias…”  (Mensaje a los Servidores Indígenas en Latacunga, 1992) y de la Iglesia Latinoamericana en general donde se insiste en la necesidad de la inculturación del Evangelio.


El SICNIE-S o sea los Servidores de la Iglesia Católica de la Nacionalidad Indígenas del Ecuador-Sucumbíos

El SICNIE-S está animado por una Directiva: Presidente, Vicepresidente, Secretario, Tesorero  y dos asesores de parte de los Misioneros
 Participan al Sicnie todos los Servidores del Vicariato de las tres nacionalidades: Kichwa; Shuar; Cofán

En el Vicariato existen dos zonas kichwas bien diferenciadas geográficamente: La Zona del Río Aguarico y la Zona de los Ríos San Miguel y Putumayo.

COSIKUA. Coordinación de los Servidores de la Iglesia Kichwa del Aguarico. Agrupa a los servidores de la Zona del Aguarico.

COPIR. Coordinación de la Pastoral Indígena de los Ríos. Responde a la Zona de los Ríos San Miguel y Putumayo.

El grupo Shuar está organizado en el SISHIS. Servidores Indígenas Shuar de ISAMIS.
Los servidores Cofanes también forman parte de la organización general de catequistas.

El Sicnie Sucumbíos se reúne tres veces al año. Los sectores  se reúnen  cada mes y medio o cada dos meses para la formación permanente, la evaluación y reprogramación

La directiva del Sicnie representa el Vicariato en las reuniones del Sicnie a nivel de la Amazonia  lo mismo a que a nivel Nacional.

Comisiones:
  • Formación y Vida de las Comunidades.
  • Educación y Jóvenes,
  • Organización y Tierras,
  • Economía Solidaria,
  • Salud,
  • Mujeres,


Dentro de la Pastoral Indígena adquiere especial importancia el tema del “Rescate” de la cultura y el apoyo a la defensa de la pluriculturalidad.

El día 12 de diciembre de 2012, la Unidad de Pastoral Indígena de ISAMIS se tornó una Parroquia Personal Indígena.

El Plan de Pastoral Indígena

Durante la elaboración del  Plan de Pastoral, cada año se cuenta principalmente con la participación directa de las Comunidades Indígenas, se establecen las tareas de la Unidad de Pastoral Indígena que asumen también los agentes de pastoral o misioneros. El objetivo fundamental es fortalecer la Unidad de Pastoral Indígena desde las comunidades y sus servidores o catequistas.
En la programación del año se incluyen las  nuevas líneas de trabajo donde la inculturalidad y sobre todo la espiritualidad propia de cada nacionalidad se tienen como líneas preferenciales para nuestro trabajo de evangelización y acompañamiento a las organizaciones.

Para ello nos  proponemos insistir en algunas otras líneas de trabajo que nos parecen elementales en el mundo indígena: educación bilingüe, salud, tierra, territorio etc. Y entre ellas se destaca la importancia de trabajar la capacitación de los servidores de las comunidades y el fortalecimiento de éstas.


COMUNIDADES

 


En el centro de toda la actividad de la pastoral indígena están las comunidades cristianas. Estamos, de alguna manera, en el tiempo de las comunidades cristianas. Ya pasó el tiempo en que el trabajo fundamental era la promoción, fundación y el acompañamiento a las organizaciones indígenas (lo que no quiere decir que no debamos estar cerca de ellas y acompañarlas en sus propuestas de ahora). Pero lo que ha ido quedando más o menos claro en la pastoral indígena es que debemos hacer hincapié en impulsar las comunidades cristianas.

Comunidades Cristianas donde se viva la fe y su compromiso desde una valoración y vivencia de las propias culturas, los propios Ministerios y la búsqueda de una liturgia encarnada tal y como nos proponen los documentos de la Iglesia. Ya hay catequistas formados y muchos que están en este periodo de formación. Hay servidores con muchos años de trabajo comprometido con las comunidades; es pues necesario un impulso fuerte en las comunidades para animarlas a ser más vivas.

La comunidad cristiana es una propuesta concreta del seguimiento de Jesús. Una propuesta abierta, como la del mismo Jesús, que quiere respetar la cultura de los pueblos (tiende necesariamente a la inculturación del Evangelio) y su mismo derecho a la autodeterminación religiosa en un diálogo franco con las culturas

 Sectores de comunidades

 De los últimos años es también la división en sectores de las comunidades de la Pastoral indígena (nos referimos sobre todo a la Pastoral Kichwa, y a la atención a Cofanes y Shuaras que conformarían lo que podemos llamar ‘sectores específicos’ o pastoral Shuar y Cofán). Todos hemos visto que ha sido un acierto que ha motivado a servidores, comunidades y misioneros. Probablemente tengamos que revisar la distribución de los sectores para hacer las comunidades más cercanas y los sectores más funcionales, pero ya es un espacio ganado por la pastoral indígena.
 El proyecto
 Objetivo general
Se trata de acompañar las comunidades indígenas del Vicariato (alrededor de 85 comunidades) de las tres nacionalidades, con el fin de impulsar el crecimiento en la fe desde los valores propios, fortaleciendo la organización comunitaria y la pluralidad de ministerios para que vaya surgiendo “una Iglesia Católica con rostro, corazón y pensamiento Indígena”.

Objetivos específicos:
Apoyar el camino de identidad cultural que hacen los pueblos los Indígenas en el Ecuador desde la fe en Jesucristo
Animar el camino de reflexión pastoral, teológica y espiritual que vienen haciendo los servidores de la Iglesia Católica en el Ecuador y especialmente en la Provincia de Sucumbíos
Ofrecer a las nacionalidades de la Provincia de Sucumbíos espacios y tiempos para que vivan y expresen su vivencia cristiana
Acompañar la organización indígena en todas sus dimensiones.

Metas:
Visitar periódicamente las comunidades desde los diferentes equipos misioneros.

Asesorar las diferentes comunidades  en las diferentes reuniones utilizando metodologías y materiales adecuados a su propia realidad.

Realizar encuentro de formación con los servidores, las mujeres, los jóvenes y niños  de las diferentes comunidades.

Contar con unos criterios comunes que permitan  la participación de las comunidades  y la inserción de los misioneros en la vida de las mismas.